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Un rincón literario


miércoles, 15 de diciembre de 2010

Góngora, Sor Juana y el retrato de Dorian Gray

Hay un soneto bastante conocido de Góngora en el que de una manera un tanto brusca nos recuerda que hay que aprovechar la edad dorada antes de que llegue la muerte con su olvido

Mientras por competir con tu cabello,
oro bruñido al sol relumbra en vano;
mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente el lilio bello;

mientras a cada labio, por cogello.
siguen más ojos que al clavel temprano;
y mientras triunfa con desdén lozano
del luciente cristal tu gentil cuello:

goza cuello, cabello, labio y frente,
antes que lo que fue en tu edad dorada
oro, lilio, clavel, cristal luciente,

no sólo en plata o vïola troncada
se vuelva, mas tú y ello juntamente
en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.


sobre el que Sor Juana Inés de la Cruz escribirá uno de sus sonetos más famosos a partir de la ficción en la que la propia autora observa un retrato suyo de juventud, capaz de vencer del tiempo los rigores y triunfar de la vejez del olvido.

Éste que ves, engaño colorido,
que, del arte ostentando los primores,
con falsos silogismos de colores
es cauteloso engaño del sentido;

éste, en quien la lisonja ha pretendido
excusar de los años los horrores,
y venciendo del tiempo los rigores
triunfar de la vejez y del olvido,

es un vano artificio del cuidado,
es una flor al viento delicada,
es un resguardo inútil para el hado:

es una necia diligencia errada,
es un afán caduco y, bien mirado,
es cadáver, es polvo, es sombra, es nada.


Sor Juana se dirige en el soneto a su retrato, y aunque su intención no creo que fuera esa, acaba convirtiendo su propio retrato en cadáver, en polvo, en sombra, en nada, precisamente lo que le pasaba al retrato del joven Dorian Gray, capaz de acumular las miserias del paso del tiempo.



3 comentarios:

  1. Aunque sor Juana no es precisamente santa de mi devoción (nunca mejor dicho) debo admitir que algunas de las cosas que escribía dan que pensar... ésta, en concreto, no imaginaba a sor Juana preocupada por su imagen y el deterioro que el tiempo produce sobre ella.

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    1. No es tanto que se preocupe por su imagen, etc, etc... Justamente el objetivo de este bonito soneto de Sor Juana es hacer una profunda reflexión sobre lo efímera que es la vida del ser humano en general usando su propia imagen como ejemplo para demostrarlo... Sin duda alguna un texto que ejemplifica por excelencia a la litteratura barroca.

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  2. Sin duda, el "Tempus Fugit" (muchísimas veces solapado con el "Carpe Diem") es uno de los tópicos más utilizados en la historia de la literatura, ¿será porque el paso del tiempo y la muerte son dos de los temas que más preocupan al ser humano?

    Justo el año pasado, para la asignatura de Cervantes hice una comparación de cómo se trataba este tema en el Barroco y en la poesía isabelina inglesa (y no nos olvidemos de Petrarca!).

    Por cierto, como dato anecdótico: se dice que la Reina Isabel I de Inglaterra(en torno a la cual se creó un mito en el que se la equiparaba con figuras celestiales), cuando estaba postrada en su cama poco antes de morir, pidió un espejo para ver su verdadera imagen reflejada, y no la imagen que se presentaba de ella en los retratos y poemas.

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